
Que el cambio climático y la desigualdad están estrechamente relacionados se sabe desde hace tiempo, pero las cifras puestas por el Informe Injusticia climática. Lo que contaminan los más ricos y pagan los más vulnerables, presentado por Oxfam en la COP 25 son demoledoras.
Desde 1960, el 50% delCO2 expulsadoa la atmósfera proviene de un país industrializadomiembro de la OCDE; mientras que los 49 países africanos al sur del Sáhara han sido los responsables de apenas el 0,02%de las emisiones. Lo que supone que el 10% más rico del planeta es responsable del 50% de las emisiones de CO2 asociadas al consumo; una pequeña élite contaminante que es 60 veces más responsable de las emisiones de CO2 que el 10% más pobre.
El estudio también ha analizado las emisiones de CO2 ligadas al consumo según niveles de renta en España y ha concluido que las producidas por el 10% de hogares más rico multiplican en 2,3 veces las del 10% más pobre, que tan solo suponen el 5,8% de las emisiones totales en nuestro país.
Ante eso se plantean la necesidad de aumentar los impuestos ambientales de una forma claramente progresiva y vincularlos a algún tipo de sistema de “cheques climáticos”.
El informe puede encontrarse: AQUÍ.




Un año más desde la Agencia Internacional de la Energía presentan su informe sobre la situación global de la energía. Un documento que suele condensar mucha información esclarecedora, pero de difícil lectura al no ser documentos divulgativos. Recomendamos las recensiones que anualmente realiza de forma crítica Antonio Turiel, donde sintetiza las claves que se van desvelando de la lectura de estos informes.


